Último y doloroso reparto de instrumentos en Percusión.

En la mañana del viernes hicimos el que será el último reparto de instrumentos de Percusión de la Orquesta JNZ. En esta ocasión había un total de 38 aspirantes, pero nos ha surgido un grave inconveniente, y es que 23 personas querían un mismo instrumento, del cual sólo tenemos 7 ejemplares. Para poder hacer una selección lo más justa posible, hemos realizado una mini prueba de acceso para comprobar la destreza y el sentido del ritmo de los aspirantes. Además se han tenido en cuenta la experiencia previa en la Orquesta y, por supuesto, el nivel de responsabilidad y compromiso demostrado durante los años que llevamos funcionando. 

Teniendo en cuenta todos los criterios imaginables, he confeccionado una lista con un orden de elección de los instrumentos. Aquellos que han apostado por instrumentos menos solicitados no han tenido problema para conseguirlo, pero era evidente que de 23 personas, muchas se iban a sentir decepcionadas, y así ha sido.

Para mí ha sido muy doloroso observar esas caras de decepción por no conseguir el instrumento que deseaban tocar, lo cual me lleva a reflexionar en la misma dirección de siempre. Que lástima que todo dependa del dichoso dinero. Que pena no poder ofrecer a todos los niños niñas que tienen ilusión un instrumento para aprender a tocarlo.

Aunque ya lo he hecho en persona, vuelvo a pedir disculpas a todas esas personas que hoy han visto rotas sus ilusiones, intento hacer las cosas de la mejor manera posible, pero sé que a muchos/as eso no les consuela.

Me gustaría darle a esta historia un enfoque positivo. No siempre se consiguen las cosas por el simple hecho de pedirlas, de hecho lo más normal que suceda es que haya que luchar mucho para conseguirlas. Además, no siempre se consigue empezar por lo que a uno o una más le gusta, muchas veces hay que bajar el listón y empezar por cosas más humildes, de hecho, han quedado varios instrumentos libres.

Yo tardé muchos años en conseguir instrumentos de calidad para tocarlos, y ahora los tenéis vosotros/as entre las manos. Algunos llevan más años conmigo que los que tenéis ahora vosotros/as, pero siempre que pueda los pondré a vuestro alcance, pues mi mayor satisfacción es veros disfrutar tocándolos.

Ánimo y a no rendirse, nunca se sabe de dónde puede salir un instrumento para tocarlo...