Sí. Lloro con mis alumnos.

Foto: Ignacio Jurado Sánchez

14 de junio de 2018, pocas horas después de que nuestro Coro Manuel Alonso haya presentado su primer CD en el Teatro Gutiérrez de Alba. Antes de irme a dormir me gustaría describir cómo he vivido esta maravillosa experiencia. 

Los días de concierto son especialmente duros para mí, tambien para el Coro, claro está, pero no puedo ni quiero irme a dormir sin escribir en caliente, cuando aún en mi paladar queda el regusto de tanta emoción vivida en este hermoso día.

Las pocas personas que tienen el privilegio (yo el primer privilegiado) de estar en todos los pases del coro, saben que cada uno es diferente. Cada uno tiene su toque, su particularidad, su dificultad. Hoy he SENTIDO en cada pase la energía, la que intercomunicaba al coro con el público. Ya escribí hace varios años, cuando dirigía la Orquesta JNZ, que mi posición en estas actuaciones es de un privilegio absoluto, porque esa energía me atraviesa y me permite tener una percepción increíble de cuanto sucede enfrente y detrás de mí con sorprendente precisión. Y este día ha habido magia, mucha magia.

Hoy, en todos y cada uno de los pases, he percibido esa maravillosa sensación de que el público disfrutaba con nuestra actuación y nos lo devolvía en cada aplauso, llegando en muchas ocasiones a la categoría de ovación. Ha habido nervios, tensión, emoción, pequeños fallos derivado de todo eso, pero sobre todo, ha habido 60 voces y un director, más un ayudante de dirección, contando una historia, la de un joven coro de colegio con aspiraciones de grandeza. Una grandeza que no está en la perfección vocal, sino en la honestidad con la que se transmite todo lo que en el escenario sucede. Un deseo incontenible de hacerlo todo lo mejor posible.

Todo estaba pensado, ideado, planificado para que fuera un día especial para el Coro, sabiendo que eso, el público,  también lo recibiría. Toda emoción se transmite y se contagia. Y así, por contagio inevitable, hemos ido hilando canción tras canción, aplauso tras aplauso, impregnando el ambiente de acordes y melodías que me han llevado hasta el infinito y más allá... hasta llegar al final del último pase en una nube de gozo y disfrute imposible de trasncribir en palabras para mí. El día de hoy lo he saboreado al máximo. Esa era la consigna. Nada de presión, nada de exigencia, hoy no, hoy sólo hay que disfrutar, al máximo.

Lo que no me esperaba, y para lo que no estaba preparado era para ver tantas lágrimas sobre el escenario. Lágrimas sinceras, sin afán de protagonismo o llamada de atención. Lágrimas que manifiestan que toda esa emoción interior sale afuera inundándolo todo. Y por supuesto, inundándome a mí también. La misma emoción mezcla de satisfacción, orgullo, recompensa... despedida en algunos casos, es la que me invade también a mí. No lo puedo evitar, ser partícipe, promotor, "director" de algo así es algo de un valor incalculable para mi. Me hace estar más vivo que nunca, más pleno, más feliz. Y sin poder ni querer evitarlo, mis ojos también se inundan... ¡Cuántas felicitaciones!, ¡cuantos abrazos!, ¡cuanto agradecimiento!. No, esto no está pagado. No con dinero.

Foto: Ignacio Jurado Sánchez

Esta noche me iré a la cama con una enorme sensación de felicidad por todo lo vivido en el Teatro, pero también por todo lo anterior que nos llevó hasta allí, todo ese esfuerzo recompensado en forma de aplausos, y materializado hoy en una cajita con 12 canciones que son mucho más que un simple CD, es la materialización de un sueño hecho realidad, bueno, uno no, unos...algo más de 60...

A mi Coro, esas personas capaces de emocionarme en cada acorde, GRACIAS por participar de este sueño, por hacerlo vuestro, por convertirlo en realidad. Ahora toca compartirlo. Espero de todo corazón que el resultado final esté a la altura que os merecéis. FELICIDADES por el espectáculo ofrecido este 14 de junio. Me consta que ha marcado un nuevo punto de inflexión. Otro más a nuestra corta pero intensa trayectoria.

Portada CD Coro Manuel Alonso

De nuevo, un millón de gracias a todas las personas que han colaborado para que todo esto haya sido posible y que haya salido tan bien. Hemos demostrado formar un equipo IMPRESIONANTE. Gracias, gracias y mil veces gracias.

A partir de ahora, el CD estará a la venta en AMPA, facilitaremos otros métodos si no puedes acercarte al colegio. Esta venta es sin ánimo de lucro. Todos los beneficios, si los hubiera, irán destinados a cubrir gastos de producción, material educativo y financiación de recursos para los proyectos que van haciendo de nuestro centro un lugar inncreíble del que sus alumnos no se quieren ir. De hecho, mi despedida va para ese grupo de alumnos/as de 6º que hoy, en su "último" concierto, han tomado la palabra para expresarse, aunque sus miradas ya lo decían todo. Mucha suerte en vuestro camino, mucho ánimo y que todo os vaya de maravilla. Os seguiremos la pista.